¿Qué dice la ciencia sobre el entrenador personal?
Un estudio (1) quiso determinar la eficacia del entrenamiento personal durante 10 semanas en personas de 20 a 65 años. En una reunión inicial, las personas (un total de 129) recibieron un formulario para autoevaluar su motivación para empezar con la práctica de ejercicio físico, eligiendo una opción de las siguientes cinco: pre-contemplación (sin intención de cambiar); contemplación (considerando un cambio); preparación (prepararse para hacer un cambio); acción (participar activamente en hacer un cambio, pero solo por un momento); y mantenimiento (manteniendo el cambio a lo largo del tiempo). Después de esto, las personas y el entrenador se reunieron una vez a la semana para debatir sobre objetivos y beneficios del ejercicio físico. Tras las 10 semanas de entrenamiento, las personas volvieron a reevaluar su motivación, encontrándose:
- 27 personas en la etapa de mantenimiento, la cual es era la opción más alta en el formulario, por lo que no podían ascender en esa motivación; 61 subieron una opción; 13 subieron dos opciones; 27 se quedaron en la misma opción; y 1 bajó una opción.
Esto viene a decir que el entrenamiento personal es eficaz para cambiar las actitudes y por lo tanto, aumentar la actividad física.
A esto se le suma la resolución de otra investigación, en la cual se comparó si era mejor (tanto a nivel muscular como de resistencia y composición corporal) el entrenamiento auto-dirigido o dirigido por un entrenador personal, siendo éste último el más efectivo (2).
En otro estudio (3) se compararon los efectos de varios tipos de entrenamiento sobre la salud y el rendimiento físico durante 12 semanas, con una duración de 45-60 minutos por sesión tres veces a la semana. Se eligieron a 72 mujeres desentrenadas (con sobrepeso), 25 hicieron un entrenamiento BodyPump, 25 entrenamiento individual con un entrenador personal, 21 en entrenamiento no supervisado y 21 en el grupo control. Primeramente se determino el 1RM en la sentadilla y press banca, y después en la composición corporal. Los resultados mostraron que el grupo de BodyPump no mejoro la fuerza comparado con los otros grupos. En el 1RM de sentadilla, el grupo de entrenamiento personal mejoro en un 17-30% más que los otros grupos de entrenamiento (BodyPump y control). En el press banca el grupo de entrenamiento personal aumento un 10-16% más que los otros grupos (BodyPump y control).
No se hallaron diferencias en comparación con el grupo de ejercicio no supervisado, así como no hubo diferencias entre grupos para la composición corporal. La conclusión fue que 12 semanas de entrenamiento BodyPump no mejora la fuerza en mujeres con sobrepeso, pero un entrenamiento personal amplifica los efectos del entrenamiento individual para la fuerza máxima en la sentadilla. Ninguno de los grupos mostró efectos sobre la composición corporal.
Otro estudio (4) examinó los efectos de un entrenamiento personal (en grupos reducidos) en hombres y mujeres de entre 19 y 78 años, evaluándose también la satisfacción, la cual se asoció tanto con la autoeficacia del ejercicio como con una mayor salud y energía. La conclusión a la que se llegó es que los programa de entrenamiento que fomentan una pertenencia social, además de motivación y autoeficacia, pueden ser útiles para la adhesión exitosa a un programa de ejercicio.
Por otro lado, se investigó la efectividad del tener o no un entrenador personalpara reducir la falta de auto-regulación en los clientes de gimnasios. Los clientes se asignaron a un entrenamiento personal individual, un entrenamiento auto-regulado, un entrenamiento grupal, y a un grupo control. Los resultados mostraron que el entrenamiento personal individual y el grupal fueron efectivos para reducir la falta de auto-regulación y facilitar el logro de objetivos. El entrenamiento individualizado generó un alto grado de satisfacción y fue superior a la hora de ayudar en los objetivos de los clientes, mientras que el entrenamiento grupal generó un aprendizaje relevante. Por otra parte, el entrenamiento auto-regulado fue insuficiente para lograr un objetivo importante. Además, la presencia de un entrenador influyó en los clientes percibiendo un apoyo en la autonomía del cliente y en la motivación intrínseca (5).
Entrenamiento de fuerza supervisado
Un estudio (6) comparó las diferencias en fuerza muscular e intensidades de entrenamiento de fuerza auto-regulado y bajo supervisión de un entrenador personal. Los participantes (hombres y mujeres entrenados) completaron 3 sesiones, separadas por 48 horas, realizando: en la primera 3 series de 10 repeticiones para prensa de piernas, press banca, extensión de cuádriceps y curl de bíceps con una carga auto-seleccionada (en dicha sesión se evaluó la intensidad auto-seleccionada); en la segunda sesión, realizaron una prueba de 1 RM para determinar la fuerza máxima en los 4 ejercicios anteriormente mencionados; y en la tercera sesión, se utilizó una prueba de 10 RM para determinar la carga máxima para realizar 10 repeticiones para cada ejercicio.
Los resultados obtenidos mostraron que:
- Las cargas de entrenamiento auto-seleccionadas fueron significativamente mayores (en todos los ejercicios) bajo la supervisión del entrenador personal en comparación con la auto-supervisión.
- Las cargas de entrenamiento auto-seleccionado, expresadas con los datos del 1RM y del 10 RM, fueron significativamente mayores bajo la supervisión del entrenador personal en todos los ejercicios, observándose la mayor diferencia en los ejercicios que trabajaban el tren inferior (prensa de piernas y extensión de cuádriceps).
- Las calificaciones de esfuerzo percibido indicaron que el entrenamiento de fuerza supervisado por un entrenador personal era ventajoso en personas entrenadas.
Siguiendo con el entrenamiento de fuerza, otro estudio comparó la influencia de realizar este tipo de entrenamiento con y sin supervisión de un entrenador personal en mujeres, las cuales o entrenaban individualmente o con entrenador personal. Se llegó a la conclusión de que el entrenamiento supervisado por un entrenador personal lleva a obtener mayores valores iniciales de 1RM, a la auto-selección de mayores intensidades de entrenamiento y a una mayor calificación en el esfuerzo percibido durante el entrenamiento (7).
Conclusiones
La evidencia nos dice que la presencia del entrenador personal parece tener efectos positivos sobre la consecución de objetivos y la motivación de las personas que entrenan, además de su labor de asesoramiento, ayuda o supervisión a la hora de realizar la técnica correcta de los ejercicios y en la programación de programas de entrenamiento, así como en dudas que puedan surgir a las personas que le contrata.
Bibliografía
- McClaran, S. R. (2003). The effectiveness of personal training on changing attitudes towards physical activity. Journal of sports science & medicine, 2(1), 10.
- Storer, T. W., Dolezal, B. A., Berenc, M. N., Timmins, J. E., & Cooper, C. B. (2014). Effect of supervised, periodized exercise training vs. self-directed training on lean body mass and other fitness variables in health club members. The Journal of Strength & Conditioning Research, 28(7), 1995-2006.
- Rustaden, A. M., Haakstad, L. A., Paulsen, G., & Bø, K. (2017). Effects of BodyPump and resistance training with and without a personal trainer on muscle strength and body composition in overweight and obese women—A randomised controlled trial. Obesity Research & Clinical Practice.
- Wayment, H. A., & Mcdonald, R. L. (2017). Sharing a Personal Trainer: Personal and Social Benefits of Individualized, Small-group Training. The Journal of Strength & Conditioning Research, 31(11), 3137-3145.
- Losch, S., Traut-Mattausch, E., Mühlberger, M. D., & Jonas, E. (2016). Comparing the effectiveness of individual coaching, self-coaching, and group training: How leadership makes the difference. Frontiers in psychology, 7, 629.
- Dias, M. R., Simão, R. F., Saavedra, F. J., & Ratamess, N. A. (2017). Influence of a Personal Trainer on Self-selected Loading During Resistance Exercise. The Journal of Strength & Conditioning Research, 31(7), 1925-1930.
- Ratamess, N. A., Faigenbaum, A. D., Hoffman, J. R., & Kang, J. (2008). Self-selected resistance training intensity in healthy women: the influence of a personal trainer. The Journal of Strength & Conditioning Research, 22(1), 103-111.
No hay comentarios:
Publicar un comentario